5 claves para el descondicionamiento del tipo Proyector Diseño Humano

Descondicionamiento para Proyectoras. Libérate de lo que no eres

Si estás aquí, probablemente también seas proyectora... y sabes lo desafiante que puede ser soltar la presión de “hacer más” o “ser como los demás”.

Como proyectoras, no estamos aquí para generar ni iniciar por nosotras mismas. Nuestro proceso de descondicionamiento se trata de soltar la necesidad de empujar, y volver a conectar con nuestro verdadero SER, y con esa frecuencia natural de reconocimiento e invitación que nos hace tan magnéticas.

Solo cuando estamos en esa frecuencia, podemos cumplir nuestra verdadera misión: guiar, organizar, mediar, y ver profundamente a los demás. Reconocer su potencial, sus talentos...y también sus desalineaciones.

Por si no me conoces yo soy Pauli, proyectora esplénica 3/5, y acompaño a mujeres proyectoras a reconocerse, y reconectar con su verdadera esencia.

Cuando actuamos desde el No Ser, es decir, desde el condicionamiento, lo que experimentamos es amargura, resentimiento, sensación de no ser valoradas. Y eso, poquito a poco, va bajando nuestra autoestima y nuestra luz. Así que hoy quiero compartirte algunas claves que pueden acompañarte en tu camino de descondicionamiento, y contarte también un poco de mi experiencia personal con cada una. Ojalá te sirvan tanto como a mí.

Clave uno: No te autoinvites

A veces, por miedo a no ser vistas, nos autoinvitamos. Y aunque lo hacemos con buena intención, eso apaga nuestro magnetismo. Sin una invitación genuina, nuestra energía se siente intrusiva para los demás tipos, y eso puede cerrar puertas en lugar de abrirlas.

Yo solía ofrecerme a ayudar todo el tiempo. Daba consejos sin que me los pidieran... y notaba que no eran bien recibidos. Al principio no entendía por qué. Pues creía que lo estaba haciendo desde la ayuda, pero en realidad lo que estaba buscando era reconocimiento.

Y es muy fácil, para nosotras las proyectoras, confundir el querer ayudar con el querer ser vistas. Por eso, antes de actuar, usa tu estrategia y autoridad.

Ahora cuando surge ese impulso de ofrecerme, simplemente me quedo presente desde la calma. Y si mi mente se inquieta, repito una frase que me ancla mucho: “No necesito reconocimiento. No tengo nada que demostrar”.

Lo que he notado que me cuesta más, es no darle consejos a mi familia. Si te animas: cuéntame cómo ha sido tu experiencia en mi canal de YouTube.

Clave dos: Usa tu energía sabiamente

No viniste a iniciar, ni a estar ocupada todo el tiempo. Tu energía no está diseñada para eso. Descansar, delegar, hacer pausas o una pequeña siesta, no te hace perezosa.

Al contrario, es esencial para recalibrar tu energía, volver a tu centro, y desde ese espacio poder estar al servicio de los demás. Yo antes no paraba, me obligaba a continuar, aunque estuviera cansada, mi mente me decía: “tienes que terminar lo que empezaste”. Hasta que mi cuerpo dijo basta y termine enfermando.

Ahí entendí que el cuerpo siempre sabe. Y si no lo escuchas, te lo hará sentir. A veces la primera señal que puedes notar, es que todo se hace más pesado, que no fluye, y si no paras, esa sensación se convierte en resentimiento, amargura, como una especie de rabia mezclada con cansancio.

Así que trata de estar atenta para que reconozcas las primeras señales, pues están ahí para indicarte que es momento de parar, respirar y reconectar contigo misma. De lo contrario, te va a costar más salir de ese resentimiento y cansancio profundo.

Clave tres: Valórate. reconócete

Tu valor no depende del reconocimiento de otros... depende de que tú misma te reconozcas. Como proyectora, estás diseñada para recibir más reconocimiento e invitaciones que otros tipos, pero solo ocurre cuando haces lo que amas, porque cuando disfrutas, tu energía se enciende... y desde ahí brillas.

Y cuando brillas, las personas correctas te ven porque estás proyectando esa energía. Las oportunidades correctas empiezan a llegar. Y todo se va alineando sin esfuerzo.

A mí, algo que me ayudó a valorarme más, fue conocer mis talentos, empezar a experimentar con ellos para aprender a reconocer esa energía dentro de mí, y así saber cómo la puedo usar haciendo lo que amo.

Mi conexión espiritual también ha sido clave, porque me ayuda a volver a mi centro, a confiar en mí, en mi propósito... y en la vida. Otra cosa importante ha sido ser más fiel a mí misma. Antes buscaba aprobación constantemente, quería que los demás validaran mi valor, mis ideas. Hasta que entendí que, si alguien no ve valor en lo que hago, está bien. No todos están destinados a reconocerme. El empezar a soltar esa idea, ha sido una gran liberación.

Así que mi invitación es a que primero te reconozcas tú. Dedica tiempo a ver tus talentos, a potenciarlos y a usarlos en lo que amas. Porque cuando disfrutas, proyectas alegría, y entonces los que son correctos para ti... te verán.

Y si te gustaría tener un acompañamiento en tu camino de reconocimiento y de conexión con tu verdadera esencia, te invito a conocer mis servicios de Diseño Humano y Coaching Espiritual.

Clave cuatro: No te conformes

Tu guía es muy valiosa, de verdad. Y precisamente por eso... no aceptes cualquier invitación.

Las proyectoras no estamos diseñadas para decir sí a todo. Solo a las invitaciones que se sienten genuinas, ligeras y que reconocen tu valor. Recuerda: no eres para todos. Eres para quienes realmente pueden verte, apreciarte y reconocer tus talentos.

Cuando aceptas invitaciones que nos son correctas, lo que ocurre es que te drenas, te agotas... y pierdes tu brillo. Aprende a poner límites desde tu verdad. A decir NO cuando algo no se siente bien.

Yo sí... sé que no es fácil para nosotras. A veces tenemos miedo de que, si decimos que no, ya nadie nos va a invitar. O miedo a que no vean nuestro valor. Pero lo que he aprendido es que, cuando empiezas a confiar en ti, en tu sabiduría interior, cuando realmente te guías por tu estrategia y autoridad, todo cambia.

Porque empiezas a ser fiel a ti misma. Empiezas a vibrar en la energía de merecimiento, a abrirte a las oportunidades. Así que te invito a ver la invitación como un mecanismo de protección, ya que te ayuda a discernir cuando tu energía no va a ser apreciada, ni escuchada. Liberándote de la amargura y la sensación de rechazo.

Clave cinco: Cultiva la paciencia

Aunque suene básico, la paciencia es una de nuestras grandes maestras, porque nos ayuda a atravesar nuestro proceso de descondicionamiento como amor, confiando en que vamos por buen camino, y recordándonos que nunca estamos tarde.

También nos ayuda a soltar el control, a dejar de forzar, y a confiar plenamente en que los tiempos de Dios, el universo son perfectos. Y claro... todo requiere práctica. Sobre todo, cuando llevamos años repitiendo los mismos patrones y ahora queremos empezar a hacer las cosas de manera diferente.

A muchas proyectoras nos cuesta tener paciencia, confiar en nuestro propio camino porque nos comparamos con otros tipos y sentimos que vamos “lento”. O nos cuenta esperar esa señal clara de reconocimiento porque quisiéramos que llegara ya.

A mí lo que me ha ayudado mucho es recordar que todas somos diferentes, que tenemos diferentes ritmos, aprendizajes y propósitos. También me sirve mucho hacer pausas durante el día para respirar o mover mi cuerpo cuando siento ansiedad o estrés pues me ayuda a reequilibrar mi energía y a volver a mi centro.

Y hay un mantra que uso muchísimo, que quizá también te sirva: suelto y confío, pues me ayuda a soltar el control, a dejar de sobre pensar, y estar más en calma.

Y estas fueron las claves que quería compartirte el día de hoy. Ojalá que te sirvan.

Como siempre toma solo lo que resuena con tu corazón, porque ese es tu mejor guía

Y recuerda que no estás sola, que tu camino es único y que todo cambia cuando vives desde tu verdadero SER.

Si te gustaría profundizar más en tu Diseño Humano, o tener un acompañamiento más personalizado para reconocerte y volver a tu esencia, aquí te dejo mis servicios por si te apetece conocerlos.

Gracias por estar aquí, por compartir este espacio conmigo.

Te mando mucha luz y amor.

Namasté,

Pauli